LISTADO

+VISTAS

Comentarios

viernes, 29 de mayo de 2009

PRIMERA CENA DE LOS PRIMOS


Por fin, celebramos nuestra cena




El cuatro de abril, del 2009, sobre las 20 horas se van acercando los participantes al antro de Ezequiel, taberna con olor a chorizo picante y bacalao salado. Solo tras haber trasegado varias birras, pueden afrontar un encuentro que ha generado una gran expectativa.

A las 10 van acercándose a la casa de comidas de Rafa, amigo de los pucheros con sabor leonés. Apenas caben todos en la estancia que les ha destinado para la pitanza.

Tras los primeros besos y abrazos, los primos se van reconociendo. De algunos recordamos las delicadas facciones de la adolescencia y la juventud -tanto hace que nos nos véiamos-, de todos, en general las viejas historias. Es lógico, antes teníamos más ocasiones de encuentro; en los últimos años se han reducido y han sido más tristes. Esto me trae el recuerdo de Fernando, querido, entrañable, cariñoso, un cielo (allí estará). Es el único de los primos del que guardamos constancia de la muerte. Hubo otro, cuando casi ninguno de nosotros había nacido, hijo de Fidela, -la hermana mayor de los nueve hermanos Redondo Sanz-, que falleció de pequeñín y de cuyo nombre no guardo recuerdo alguno.

Acudieron: los de Pablo, todos, hasta en tercera generación (gracias Rosa y Pedro por vuestro atrevimiento y valentía) y con sus parejas; los de Antonio, todos, yo mismo con dos de mis niñas (gracias también a Carla y a Leny por su afán de conocimiento); los de Lici todos, con parejas y con su alegría secular; de Raquel, Ruchy, como una reina con su cachorro (gracias Gillermo, también te atreviste y querías conocer): de Nardo, -el benjamin de Epifania y Victorino-, Pablo con esa marcha rockera que demostró, luego en la disco.

Abuelos y adolescentes compartiendo viandas de potencia extraordinaria, para una cena, que nos vimos obligados a quemar después en la discoteca a la que nos arrimaron, no los más jóvenes como cabía esperar, sino May y Agus, que continúan tan disipados como de constumbre. Disco en la que bailamos sin parar hasta que un Sol deslumbrante apareció en lontanaza.


Junto a piezas del año la pera, que costaba trabajo digerir, el DJ nos colocó un material de bakalao y de pachanga, de todas las tendencias, incluidas la maldita salsa y la excelente rumba catalana. La única forma de soportar aquel infernal ruido, fue el consumo desmedido de los brebajes que nos preparaba una barman que no tenía ni puta idea de lo que algunos le pedíamos; ya que se trataba de mezclas antaño famosas, pero hoy muy poco conocidas.


Al llegar a casa, en lugar de acostarme rendido, tuve que afrontar el contar, pormenorizadamente, a mi mamá, los detalles de toda la cena y su prólogo ¡manda webos! hasta bien entradas las nueve de la mañana.

Tan magnífico estuvo el evento, que todos los primos coincidimos, por unanimidad, en convocar otro contuvernio de la misma natureleza. Por riguroso sorteo, les ha tocado el placer inmenso de organizarlo a Rosa (la de Pily para enterdernos) y a Pablo -también Victorino- (el de Flory).

Animaros a publicar vuestras impresiones en este blog tan cojunudo que ha preparado Tory.


Besos

Juan Antonio

¡¡¡ESCUCHAD A BARRABAS QUE OS MUERDE!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario